El dinero en nuestra sociedad se ha convertido en una necesidad imperiosa de la que no se puede prescindir. Aunque gracias a las nuevas tecnologías el trueque e intercambio de tiempo ha reconquistado un cierto espacio, hay muchas cosas básicas como la factura de la luz, del agua o el teléfono en las que sólo nos sirven los euros. Y cuando uno no tiene dinero y los bancos no dan crédito la tentación es buscar en Internet una empresa de créditos rápidos que nos ayude con un minipréstamo. Encontrarás páginas Web y blogs que te explicarán lo rápido, lo fácil y sencillo que es coger un crédito. Sin papeleos, sin nóminas, sin complicaciones, aun estando en el paro o jubilado. Te señalarán que algunas empresas ofrecen créditos gratis, con un 0% de intereses, para nuevos clientes. Y quizás para ti sea una buena opción coger ese dinero.

Pero para la mayor parte de personas pedir dinero no es ninguna solución. Si ya te has dado cuenta que firmar este tipo de trato no te beneficia, que muchos prestamistas usan la usura para enriquecerse, este artículo es para ti. Aquí vamos a ver varias formas de vencer a los créditos rápidos, y para ello lo más importante es que te des cuenta de que necesitas conquistar tu libertad económica.

10 puntos para vencer a los créditos rápidos

1. No necesitar su dinero. La primera forma de vencer es quizás la mejor, no tener necesidad de ellos. Aquí caben diferentes estrategias, desde las personas que consiguen tener una economía solvente y han ahorrado una cantidad importante de dinero, hasta aquellas personas que han desarrollado un sistema de vida autónomo en el que casi no necesitan dinero.  En todas sus modalidades la victoria es tan grande, que estas personas la mayor parte de veces ni siquiera se plantean la necesidad de pedir dinero a nadie, e incluso son ellos los que ayudan a personas de su familia a superar los baches económicos.

2. No pedir dinero a nadie. Otras personas a pesar de que sí tienen consciencia de que necesitan más dinero para pagar las facturas o para cumplir sus sueños, deciden no pedir dinero a nadie, pues de hacerlo la deuda contraída les haría sentirse esclavos. Hay mujeres y hombres, que se consideran anticapitalistas, antisistema, anarquistas… y lo harán por ideología, mientras que otras personas lo hacen por simple autoestima, no les gusta estar en deuda. No es una decisión fácil, sobre todo si uno es responsable de una familia, pero muchas veces es más acertada que pedir dinero. Para controlar esto es muy importante que realices un seguimiento de tu economía doméstica y aprendas a equilibrarla. Puedes rebajar tus gastos, o puedes buscar la forma de tener nuevos ingresos. Deja de lado la imagen que tienen los demás de ti. Si al final no tienes que pedirle dinero a nadie, felicidades has vencido.

3. Buscar un préstamo alternativo que no sea usurero. Tampoco hay que caer en la simpleza de pensar que pedir dinero es malo por si mismo, pues por ejemplo para empezar un nuevo negocio es muy probable que necesites una inyección de dinero. En el caso de que necesites dinero y vayas a pedirlo aún puedes vencer a los préstamos online. Es simple, no les pidas a ellos. Busca una alternativa que tenga intereses anuales por debajo del 12-14%. Un banco, un préstamo personal con un familiar, crowfunding, micropréstasmos personales online, la caja de ahorro de Onteniente… Por encima de esta cantidad se considera usura. Al escoger esta vía la victoria es diferente, porque estas creando una demanda de préstamos más éticos, algo muy necesario. No olvides que aunque traten de hacerte ver que no es así, en el sistema capitalista el poder final lo tiene el consumidor. Así que elige bien que consumes, porque ese es el mundo que estas construyendo para el futuro.

4. Pagar tu crédito rápido y zanjar tu relación con ellos. Si ya has pedido el dinero y es ahora cuando te das cuenta que te va a resultar difícil devolverlo, aun puedes ganar a estas empresas. ¿Cómo? Pagando en el tiempo establecido. Parece paradójico, pero cuando más se enriquecen estas empresas es cuando no cumples el acuerdo, ya que entonces te añaden varias comisiones que pueden hacer que por comprar un mueble de 800 € acabes pagando más de 3.000 €. No dudes, haz lo posible por devolverles el dinero. Una vez devuelto te habrás desecho de ellos, felicidades, has vencido. Si sientes que es una victoria a medias, aún hay más cosas que puedes hacer. Aplica los puntos 5, 6 y 7.

5. Escribe tu opinión y experiencia en Internet. Muchas personas antes de dar el préstamos para contratar un crédito buscan información en Internet, de forma que tu comentario puede ser de gran ayuda para que aquellos que están indecisos busquen una opción mejor. Hay varios sitios en los que puedes dejar tus impresiones, y este blog es uno de ellos.  Puedes dejar tu comentario aquí mismo, aunque lo ideal es que el comentario lo dejes en el artículo específico que he creado para cada empresa. Puedes encontrar el artículo de opiniones sobre créditos rápidos que necesitas haciendo clic aquí. Si te cuesta explicar que te has sentido estafado, puedes hacerlo de forma anónima, sin usar tu nombre o cuenta de correo usual. Otra cosa muy importante es no criticar a las personas que explican que han sido blancos de un timo, ya que así lo que se hace es discriminar a la víctima y no a la empresa que se ha beneficiado.

6. Apoyar a otras personas con problemas económicos. Hay mil formas de ayudar a personas que tienen problemas económicos. Van desde dejar dinero a un familiar o amigo, hasta formar parte de asociaciones altruistas como los bancos de alimentos. Este tipo de acciones solidarias, directa o indirectamente mellan la base sobre la que hacen negocio los usureros: la soledad, la miseria y la desesperación. Una cosa que aprendí en mi primer viaje a Asia, es que es posible ser pobre y tener una vida digna, feliz y recta.

7. Unete al foroantiusura. En foroantiusura.com encontrarás una comunidad de personas que han sido afectadas por diferentes tipos de abusos económicos, sobre todo créditos rápidos con intereses abrumadores. Allí puedes expresar tus ideas, explicar tu situación y pedir consejo. Te ayudarán entre otras cosas a que veas más clara cual es tu situación y que opciones tienes en el caso de que te resulte imposible pagar el dinero de la deuda. Podrás leer las experiencias de otras personas que han vencido a los créditos rápidos e insipirarte en ellas.

8. Transmitir una visión crítica sobre la economía. Otra forma de luchar y vencer a aquellas empresas que se enriquecen a través de las personas que tienen urgentes necesidades económicas es hablar del tema. La educación financiera es un punto fundamental para que nuestra sociedad funcione mejor, ya que con el dinero premiamos los actos de los demás. ¿Vas a premiar a los usureros o a personas nobles? Una forma sencilla de transmitir esas ideas es usar las redes sociales para apoyar a páginas Web que aportan información valiosa como economiasolidaria.org, o rapidouncredito.com. Si haces un like de Facebook, un +1 en Google Plus o un tweet de Twitter no sólo ayudas a difundir  esta Web, sino que también a que este mejor posicionada en Google. También puedes contratar los servicios bancarios en la nueva banca ética, formar parte de una cooperativa local, dar cursos de economía financiera para jóvenes o adultos… Seguro que tú tienes muchas más ideas.

9. Pedir a los partidos leyes antiusura. La legislación de España al respecto es clara y a la vez muy tolerante. Una forma de mejorar la situación global seria que alguna ley impidiera los préstamos por encima de cierto interés, y que esta ley se aplicara de verdad, multando a las empresas que no lo cumplan. Para ello hay varias formas de hacer presión. La más evidente es votar en las elecciones generales en consecuencia. Pero también es importante preguntar a los partidos si ellos van a hacer algo al respecto, si lo llevan en sus programas. También se podría pedir el cambio de ley a partir de una iniciativa popular ciudadana, o hacer presión con plataformas como changes.org

10. No pagar y denunciar. Aunque quizás te parezca un poco extremo hay muchas personas que se enfrentan a los créditos rápidos denunciando en el juzgado y ganando el juicio. Esto es posible ya que las leyes de España prohíben la usura, lo que sucede es que es una ley blanda, que no añade un % máximo para los intereses, pero si que te da posibilidad de denunciar si consideras que has sido timado. La resolución final depende del juez, que puede dictar por ejemplo que devuelvas el dinero que se te presto y nada de los intereses. De esta forma el prestamista pierde los intereses por querer aprovecharse.

En mi caso pedí un par de préstamos personales y use demasiado la tarjeta de crédito del banco, aunque por fortuna y gracias a la recomendación de un amigo no llegué nunca a tener un crédito con empresas como Cetelem o Cofidis. Así que mi media victoria fue con el punto 3, aunque para mi fue un fracaso. En determinado momento mi vida sufrió un cambio importante, así que tome la determinación de cumplir el punto 2 y no pedir dinero a nadie. Luego cree este blog a partir de un concurso de SEO pero con la intención de crear algo diferente, cumpliendo con el punto 8, transmitir una visión crítica sobre la economía.

En este momento de mi proyecto vital siento que he vencido, aunque la lucha sigue en el punto 1, tratando de mejorar mi economía doméstica, y en el 8, escribiendo este blog.  Con estos comentarios finales cumplo el punto 5, exponiendo mi experiencia directa y como este es un año electoral en España, tendré que dedicar pronto algún artículo centrado en el punto 9. ¿Cómo vences tú a los créditos usureros?